domingo, 1 de febrero de 2009

RESPUESTA A LAS ÚLTIMAS ENTRADAS

He leído ya los correos que me habéis enviado con las respuestas a las preguntas sobre Daniel y sobre el cartel del concurso literario. Además de las personas que me han entregado el texto en mano, he recibido respuestas de Aida, Mar, Jénnifer, Berta, Vicent U. y de Ana Oviedo.He seleccionado dos de ellas.
Sobre Daniel
¿Podrías contar la historia bíblica en la que aparece este nombre que da sentido al joven protagonista?
Daniel era un hombre de rezo. Él tenía el hábito de rezarle a Dios tres veces al día. Daniel sabía la ley(no podía orar a Yahvé), pero él continuó rezando cada día como siempre . El rey Darío simpatizaba con Daniel, pero los príncipes le contaron que Daniel no había cumplido la ley, el rey tenía que castigarlo. Él se dio cuenta demasiado tarde que los príncipes lo habían engañado para aprobar aquella ley.
El rey ordenó que Daniel fuera castigado dentro de la fosa de los leones (…). El rey estaba tan preocupado por Daniel que no podía dormir por la noche. Lo primero que hizo a la mañana siguiente fue ir a ver si Daniel había muerto. Él gritó para ver si Daniel estaba vivo y este le respondió:- Mi Dios envió a su ángel, el cual cerró la boca de los leones, para que no me hiciesen daño. Finalmente el rey se puso muy contento y liberó a Daniel.

¿Sabrías decir por qué también le pusieron de apodo Mochuelo?
Por su modo de mirar las cosas.
Germán, el hijo del zapatero, fue quien primero reparó en su modo de mirar las cosas. Un modo de mirar las cosas atento, concienzudo e insaciable.
-Fijaos –dijo-; lo mira todo como si le asustase.
Y todos le miraron con mortificante detenimiento.
-Y tiene los ojos verdes y redondos como los gatos –añadió un sobrino lejano de don Antonino, el marqués.
Otro precisó aún más y fue el que dio en el clavo:
-Mira lo mismo que un mochuelo.
Y con Mochuelo se quedó, pese a su padre y pese al profeta Daniel y pese a los diez leones encerrados con él en una jaula y pese al poder hipnótico de los ojos del profeta. La mirada de Daniel, el Mochuelo, por encima de los deseos de su padre, el quesero, no servía siquiera apaciguar a una jauria de chiquillos. Daniel se quedó para usos domésticos. Fuera de casa sólo se le llamaba Mochuelo.
Berta Sanvíctor Beneyto

Sobre el cartel
El personaje del cartel es Miguel de Cervantes, famoso en todo el mundo sobre todo por ser el autor del Quijote, y está citando una frase en latín: “nulla dies sine linea” que significa ningún día sin una línea.
Esta cita fue escrita por Plinio el Viejo, un
escritor latino, científico, naturalista y militar romano que murió en el año 79 y su significado es que no se pase un día sin leer o escribir una línea.
Por lo tanto, el cartel quiere motivar a los alumnos a que, poco a poco, aunque solo escriban una línea por día, hagan su escrito y lo presenten al concurso literario.

A. Oviedo

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